Hotel Restaurante Blanco
El negocio abrió en 1967, lo que para algunos es toda una vida, pero comenzaron a trabajar como Blanco en 1991. Por su nombre y ubicación, nos cuentan, los suelen confundir con el Bar-Restaurante de Cangas del Narcea, ya que ambos se encuentran en la Asturias occidental, pero el espacio que nos ocupa hoy está en Navia, cerca de la costa.
Cuando arrancaron, lo hicieron como una tienda de ultramarinos, y a lo largo de las décadas el concepto fue evolucionando: han sido casa de comidas, hostal y, finalmente, se asentaron como el hotel que ahora son, regentado por la tercera generación de la familia que lo vio nacer, con cuatro estrellas, un fantástico spa, gimnasio, zona de piscinas, salones para todo tipo de eventos y, por supuesto, un restaurante que es todo un referente en la zona.
La cocina es tradicional, pero con platos actualizados: podemos disfrutar con elaboraciones asturianas, mucho producto local y una clara influencia de la gastronomía de la vecina Galicia – croquetas líquidas de oricio, tartar de wagyu, sardinas marinadas, ensalada de perdiz escabechada o de bugre, salpicones de marisco y arroces cremosos, pescados de roca, cocochas de merluza del pinchu, pulpo del pedreru, pixín, paletilla de lechal, papada ibérica, cortes de rubia gallega... una propuesta con un claro espíritu gastronómico que demuestran con su menú degustación, con una bodega con más de 300 referencias y con la cantidad de concursos gastronómicos que ganan o en los que quedan finalistas.