Sagàs, a cada cual su bocadillo
Los hermanos Rovira, reconocidos con una estrella Michelin por su labor en el restaurante Els Casals, se animaron el 19 de mayo de 2011 a abrir, en colaboración con el Grupo Sagardi, el restaurante Sagàs Pagesos, Cuiners & Co, una innovadora propuesta de restauración que ponía sobre la mesa los mejores bocadillos del mundo, elaborados con productos de primera calidad. Ubicado en el barrio del Born (Barcelona), este flamante establecimiento es el proyecto personal del pequeño de la familia, Oriol Rovira, que nos invita a degustar, con las manos, bocadillos selectos oriundos de diferentes rincones del mundo y elaborados, sobre todo, con productos frescos y ecológicos procedentes de las tierras que los Rovira tienen en el Berguedà (Girona). Para dar protagonismo al producto, la propuesta de Sagàs gira en torno al concepto finger food, la sencillez de comer con las manos: “Comiendo así es cómo más cerca estamos del producto”, afirma Rovira. Orígenes y mundo La carta del restaurante, con más de 20 referencias de selectos bocadillos, tiene dos claras vertientes. Por un lado, propuestas basadas en los orígenes, como la entrebaguette artesana de butifarra negra con cebolla a la Garnatxa del Priorato, o la chapata de tocino, alcaparras, higos, ruca, queso fresco de la Quar, olivada y vinagreta de carquiñolis. La segunda premisa de la carta Sagàs tiene sus raíces en el origen geográfico del producto, como el Banh Mi, típico de Vietnam y con claras influencias coloniales francesas, el clásico frankfurt Baviera o el Bo Ssam, un bocadillo típico de los restaurantes coreanos. Oriol Rovira viajó a Nueva York hace cuatro años y quedó prendado de cómo en una pequeña urbe se pueden condensar tantas culturas y riquezas gastronómicas. Regresó con la idea de crear este restaurante y pronto el grupo Sagardi le dio el empujón necesario para tirarlo adelante. “Mi deseo es que la gente que vaya viniendo vaya descubriendo sabores hastra saber cuál es su bocadillo”, dice. El quinto y el porrón La tradición catalana no solo la hallamos en los embutidos y otros ingredientes, sino también en las bebidas. Sagàs recupera el quinto de cerveza, así como la figura del porrón de cerveza. “Para mí -dice Oriol Rovira- el quinto es el mejor formato de cerveza que existe, el más versátil”. Así, para los postres, nos propone unos carquiñolis o el clásico chocolate, aceite y sal. Una carta que está viva y que en verano incorpora platos como el helado de vainilla con fresas.