Diez platos para aprovechar los restos del cocido

16 Enero, 2024
Manel Bonafacia

Los caldos y cocidos suelen ser abundantes en carnes y verduras, y a menudo ponemos más de las que se van a consumir junto a la sopa para conseguir un sabor más intenso. Aunque tanto unas como otras habrán dejado parte de su gusto en el caldo, aquellos tropezones que no nos comamos pueden emplearse para preparar otros platos al día siguiente y así evitar desperdiciarlos. 

No es algo nuevo, siempre se ha hecho en platos como la ropa vieja, las croquetas o los canelones, pero podemos preparar muchos más: bastará con aplicar trucos para realzar su sabor o convertirlos en preparaciones que nunca asociaríamos a nuestros caldos, como unos tacos o un falafel. Solo debemos tener presente que, si vamos a aprovechar las verduras, debemos cocerlas el tiempo justo para que estén tiernas y dejen su sabor en el caldo, pero sin que se pasen ni se deshagan, sin tenerlas tres horas cociendo como hacemos con las carnes. Con este consejo en mente, ahí van diez ideas para sacar el máximo provecho a los productos que echamos a la olla.

Trinxat de verduras

Trinxat

Las verduras del caldo están buenas simplemente recién salidas de la olla y regadas con un chorro de buen aceite, pero podemos darles más sabor preparándolas como un trinxat. Para ello, chafamos con un tenedor patata, zanahoria, repollo, nabo o chirivía. Cortamos tocino salado a tiras y lo ponemos a deshacer en una sartén. Añadimos un ajo picado y, cuando el tocino esté dorado, subimos el fuego y en la grasa restante freímos las verduras, mezclándolas bien con una espátula y dándoles forma de tortilla. Doramos bien por los dos lados y servimos como primer plato o acompañamiento de alguna carne a la plancha. También podemos freírlas con butifarra negra o chorizo desmenuzados

Ropa vieja

Ropa vieja

La ropa vieja es uno de los platos más clásicos para aprovechar las viandas del cocido, es un plato fácil de preparar y sabroso. Cortamos cebolla, pimiento verde y rojo en dados o tiras y los ponemos a sofreír en una sartén con aceite. Cuando las verduras estén pochadas, añadimos la carne de ternera (morcillo o el corte que hayamos utilizado) y pollo o gallina deshilachada. Removemos bien, agregamos salsa de tomate y cocinamos dos minutos más para que se integren bien todos los ingredientes. Acompañado con un poco de arroz blanco, tenemos un plato completo. 

Tortilla de cocido

Tortilla de cocido

Igual que si fuéramos a preparar una tortilla de patatas, batimos los huevos en un bol, añadimos garbanzos, chorizo, tocino y morcillo cortados a dados, y cuajamos la tortilla al gusto en una sartén caliente con aceite. 

Tacos

Tacos de carne

Deshilachamos la carne del cocido (ternera, cerdo, pollo, gallina…) y la ponemos a calentar en una sartén. Añadimos un buen chorro de salsa barbacoa o una salsa mexicana tipo Valentina y lo calentamos. Servimos sobre tortillas para tacos con cebolla encurtida o cebolleta tierna, un chorrito de zumo de lima y cilantro picado por encima, junto con más salsa para que cada comensal se sirva al gusto. 

Oreja a la gallega

Oreja

Cortamos la oreja del caldo en trozos de bocado y los calentamos en el microondas o los pasamos por la sartén con un poco de aceite si nos gusta más crujiente (con la sartén tapada, ya que si no explota). La servimos espolvoreada con sal gruesa y pimentón dulce y regada con un buen aceite de oliva. 

Falafel

Falafel

Escurrimos y secamos bien los garbanzos y los trituramos en una picadora o los aplastamos con un tenedor. Picamos una cebolla morada (por 400 g de garbanzos) con hierbas al gusto (por ejemplo, perejil, cilantro y hierbabuena) y el comino en polvo. Mezclamos con los garbanzos y levadura, salpimentamos y añadimos pan rallado si hace falta, hasta conseguir una masa homogénea. La dejamos reposar en la nevera media hora para después hacer unas albóndigas que aplanaremos ligeramente con las manos, rebozaremos con pan rallado y freiremos.  

Servimos solas, espolvoreadas con semillas de sésamo y con una salsa yogur (yogur, aceite, menta, sal y pimienta) o en formato bocadillo en el interior de un pan de pita. 

Bocadillos

Bocadillo

Las carnes del cocido deshilachadas pueden rellenar perfectamente un bocadillo hecho con dos rebanadas de pan tostado untadas con un poco de allioli u otra salsa. 

Croquetas de cocido

Croquetas de cocido

Preparar unas croquetas es la solución más socorrida y la primera que nos viene a la cabeza cuando hablamos de aprovechar las carnes del cocido. Para ello, picaremos la carne a máquina o a cuchillo, según si nos gustan las croquetas con trozos grandes o no, y la mezclaremos con una bechamel espesa, dejando que se cocinen conjuntamente durante cinco minutos. También podemos añadir alguna zanahoria del cocido chafada. Dejamos reposar unas horas en la nevera en un recipiente cubierto con film. Damos forma a las croquetas, las pasamos por harina, huevo y pan rallado y las freímos. 

Empanadillas o empanada

Empanadillas

Compramos obleas para empanadillas y las rellenamos con una farsa que prepararemos con carne de cocido picada mezclada con salsa de tomate a la que podemos añadir un sofrito de cebolla, pimientos, zanahoria y hierbas al gusto. 

Las podemos cocinar al horno, pintadas con huevo batido, o fritas en aceite abundante. Con una pasta brisa o similar podemos preparar una empanada con el mismo relleno.  

Pilota rebozada o en salsa

Pilota

Uno de los ingredientes imprescindibles de la escudella catalana es la pilota (pelota), que se elabora como unas albóndigas con carne picada de tercera y cerdo, huevo, pan remojado en leche, ajo y perejil, se reboza en harina y se cuece en el propio caldo. 

Si sobra pilota, cosa que no sucede con frecuencia ya que suele ser una de las viandas preferidas por los comensales, se puede cortar en rodajas de un dedo de grosor. Las rodajas se pueden rebozar, freír y servir con allioli o calentarlas en una salsa de tomate con cebolla.