10 recetas de sopas y cremas de primavera
En primavera los días ya no son ni tan fríos ni tan cortos como durante el invierno. Pero a los fans del cuchareo nos sigue apeteciendo disfrutar de sopas y cremas porque pensamos que la cuchara en la mesa es una actitud: cuanta más mejor.
Eso sí, para las sopas de primavera preferimos combinaciones ligeras y vegetales y a las cremas les va de fábula incorporar un toque fresco interesante y resultón. Elementos como la menta, el hinojo o el apio nos aportan matices anisados y generalmente combinan muy bien con los ingredientes propios de la primavera como pueden ser los guisantes, los espárragos o las fresas.
La personalidad de estas sopas y cremas de primavera ha de ser básicamente vegetal para aprovechar también el estallido en clorofila de la estación. Aunque desde luego podemos seguir utilizando a placer elementos como unas jugosas albóndigas de pescado o atrevernos a disfrutar de interesantes combinaciones de pastas rellenas en sopas de inspiración italiana.
El mundo de la sopa primaveral es una explosión líquida y vegetal que inicia un camino que culminará en los gazpachos y ajoblancos de verano. Te proponemos diez recetas e ideas para que puedas disfrutar de la primavera puesta en el plato, para comer a cucharadas.
Sopa cremosa de guisantes con toque de calabacín y apio
Ingredientes:
500 g de guisantes, 1 calabacín, 1 puerro, 3 chalotas o 1 cebolleta, 1 patata, ½ rama de apio, 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, 1 cucharada de vinagre de Jerez, sal, pimienta negra recién molida y un poco de caldo de verduras.
Elaboración:
- Pelamos la patata y la cortamos en trozos, que ponemos a cocer en una olla con agua y sal. Mientras tanto, cortamos el calabacín, las chalotas y el puerro.
- Cuando las patatas llevan 10 minutos cociendo, añadimos el resto de verduras menos los guisantes y el apio. Cocinamos 5 minutos más.
- Añadimos los guisantes y el apio. Terminamos de cocinar, lo hacemos así porque nos interesa que se mantenga bien el sabor fresco e intenso de los guisantes.
- Ponemos la verdura en el vaso triturador o en el robot y trituramos bien aliñando con el aceite, el vinagre, la pimienta y la sal. Para conseguir la textura deseada, utilizamos un poco de caldo de verduras para diluir el puré inicial (también se puede usar el agua de cocción de las mismas).
Crema de remolacha con fresas de primavera
Ingredientes:
250 g de remolacha cocida, 250 g de fresón, 4 tomates de colgar, 1 ajo tierno, 1 puñado de nueces peladas, 1 rebanada de pan de molde, 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, 1 chorrito de vinagre de Jerez y sal.
Elaboración:
- Lavamos y cortamos las fresas en trozos, también quitamos cualquier resto de piel o brote a la remolacha y la partimos.
- Cortamos los tomates por la mitad y los agregamos a un vaso triturador o robot de cocina junto a las fresas y la remolacha.
- Añadimos la parte blanca del ajo tierno cortada en rodajitas y la rebanada de pan de molde sin la corteza.
- Trituramos bien hasta formar una masa homogénea y la condimentamos de sal, aceite y vinagre. Si nos queda muy espesa, la podemos aclarar un poco, pero ha de ser cremosa. Si queremos convertirla en una especie de salmorejo, podemos añadir un poco más de miga de pan hasta la textura que nos guste.
- Servimos con rodajas de fresa, las nueces partidas y un poco de cebollino.
Sopa de albóndigas de pescado
Ingredientes:
1 kg de caballa (vale cualquier pescado azul), 2 rebanadas de pan de molde (puede ser pan normal sin la corteza), 1 cucharadita de curry en polvo, 1 ajete (puede ser un diente de ajo), unas hojas de perejil, 1 yema de huevo, un poco de leche para remojar, un poco de harina para las albóndigas, 1 l de caldo de pescado bajo en sal o de caldo de verduras, 200 g de hojas de espinaca baby, 2 zanahorias, 1 cebolleta, un puñado de pasta tipo lágrimas y queso rallado.
Elaboración:
- Pedimos a nuestro pescatero que nos separe los filetes de caballa, y ya en casa, retiramos con cuidado todas las espinas y cualquier resto de aleta o similar que pueda quedar. Atención con la tira central de espinas que tiene la caballa a lo largo del cuerpo, para que luego no encontremos ninguna en las albóndigas.
- Picamos fino los filetes, como si fuera para un tartar, y los mezclamos con la yema de huevo, el curry en polvo y la miga de pan remojada en leche. Añadimos un poco de sal, pimienta, el ajete muy bien picado y unas hojas de perejil también picadas.
- Con la masa formada, formamos las albóndigas y las pasamos por harina para a continuación freírlas en aceite y que queden selladas y doradas por fuera. Las reservamos.
- En una cazuela con un chorro de aceite, ponemos a dorar la cebolleta picada y las zanahorias. Antes de que la cebolla tome color, añadimos un punto de sal y pimienta.
- Incorporamos el caldo y cocinamos durante 10 minutos, momento en que añadimos la pasta y las albóndigas para terminar su cocción (unos 5 min, a fuego bajo para que no se rompan).
- Justo antes de retirar del fuego, rectificamos de sal y añadimos las hojas baby de espinaca. En el momento de servir, añadimos por encima un poco de queso rallado.
Crema fría de pepino, yogur y menta
Ingredientes:
2 pepinos medianos, 1 cebolleta , 1 ajo tierno, dos yogures griegos, 1 puñado de hojas de salvia, 1 puñadito de hojas de menta, 3 cucharadas de aceite, 1 cucharada de zumo de limón, sal, pimienta y agua mineral para aclarar si nos hace falta.
Elaboración:
- Quitamos las puntas de los pepinos y picamos la cebolleta y el ajo tierno. Los ponemos en un vaso triturador junto con los yogures y buena parte de las hojas de salvia y menta.
- Trituramos bien hasta obtener una mezcla homogénea. Aliñamos con el aceite, el zumo de limón, la sal y la pimienta.
- Utilizamos un poco de agua para aclarar hasta la textura que nos guste.
- Servimos bien fresco con unos dados de pepino y hojas picadas de salvia y un poco de menta.
Sopa jardinera con pesto rojo
Ingredientes:
2 cebollas, 2 zanahorias, 1 rama de apio, ½ calabacín, 1 diente de ajo, un puñado de judías verdes redondas, 1 puerro, 3 cucharadas de tomate concentrado, 1,5 l de caldo vegetal bajo en sal o de caldo de pollo bajo en sal, aceite de oliva virgen extra, sal, pimienta y 250 g de pasta corta. Para el pesto rojo: 10 o 12 tomates deshidratados, 10 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, 1 diente de ajo, 5 cucharadas de queso parmesano rallado, 30 g de piñones tostados, un chorrito de vinagre balsámico y una pizca de sal.
Elaboración:
- Lavamos y cortamos en dados la cebolla, la zanahoria, el calabacín y el apio. Picamos el puerro y el ajo. Cortamos las judías en rodajas y nos dejamos todas las verduras bien preparadas.
- En una cazuela con un chorro de aceite añadimos primero la cebolla y la zanahoria, que rehogamos a fuego medio durante unos cinco minutos.
- Añadimos el tomate concentrado, el puerro y el ajo y doramos dos o tres minutos más. Añadimos el caldo y rectificamos de sal y pimienta.
- Cocinamos durante unos 15 minutos para que las verduras transfieren sabor al caldo y estén ya algo blandas. Añadimos la pasta y terminamos de cocinar.
- Para preparar el pesto rojo: hidratamos los tomates secos poniéndolos media hora en agua tibia (no hace falta si son de los que vienen en aceite). Los secamos y ponemos en un vaso de túrmix junto con el resto de ingredientes. Trituramos bien hasta que se forme una pasta homogénea, densa y aromática. Puedes utilizar algo más de aceite para regular la densidad de la salsa.
- Desleímos un par de cucharadas de pesto rojo en la sopa a modo de picada y ya tenemos la sopa lista para servir.
Crema de espárragos
Ingredientes:
500 g de espárragos, 1 patata, 1 puerro, 1 ajo tierno, 750 ml de caldo de verduras (o agua mineral), aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta.
Elaboración:
- Corta la parte leñosa inferior de los espárragos y trocea el resto. Reserva.
- En una cazuela con un chorro de aceite de oliva, sofríe el puerro y el ajo tierno picados hasta que cojan un poco de color. Añade la patata pelada y en trozos, salpimenta y a continuación añade el caldo de verduras y cocina a fuego medio hasta que la patata esté cocida.
- Mientras tanto saltea los trozos de espárrago en una sartén con un poco de aceite y sazónalos con sal y pimienta. Simplemente para dorarlos un poco y que suban de sabor. Cuando falten dos o tres minutos para terminar la patata, añádelos a la cazuela y termina de cocinar conjuntamente.
- Tritura el conjunto hasta obtener una crema densa y fina.
Sopa de tortellini con albahaca y tomate
Ingredientes:
Tortellini de ricotta y albahaca (también pueden ser de carne), 2 cebollas, 2 dientes de ajo, 1 zanahoria mediana, 4 tomates maduros (si no tenemos, 1 lata de buen tomate en conserva), 2 cucharadas de tomate concentrado, un manojo de albahaca fresca, 1 l de caldo de verduras bajo en sal, aceite de oliva virgen extra, ½ vaso de nata líquida, ½ vaso de vino blanco, sal y pimienta.
Elaboración:
- Picamos las cebollas y los ajos. Los ponemos a dorar en una cazuela con un chorro de aceite de oliva.
- A fuego lento, vamos removiendo de vez en cuando hasta que cojan color, en ese momento añadimos los tomates picados, las zanahorias también picadas menudas y el tomate concentrado junto con un pellizco de sal y pimienta.
- Continuamos con el sofrito, removiendo cada pocos minutos hasta que el sofrito coge un color oscuro y empieza a tomar una textura como de mermelada.
- Añadimos entonces el vino blanco y subimos el fuego para evaporar el alcohol. Cuando el alcohol se ha evaporado, añadimos una parte el caldo y trituramos bien y colamos para lograr un caldo bien fino.
- Lo volvemos a poner en la olla y rectificamos el caldo de sal y pimienta. Cocinamos los tortellini en este caldo y cuando quedan dos minutos para el final, añadimos un chorro de nata líquida para afinar la textura y el sabor final. De forma opcional, podemos añadir unas salchichas de pollo salteadas y cortadas en trozos ya al final de la cocción.
- Terminamos con hojas de albahaca fresca picadas y recién cortadas para que el aroma en la mesa sea espectacular.
Crema de zanahoria con vieiras a la plancha
Ingredientes:
2 vieiras por persona, 700 g de zanahorias, 1 patata, 200 g de calabaza (opcional, pueden ser más zanahorias), 2 cebolletas, ½ vaso de nata líquida, sal, pimienta, aceite de oliva virgen extra, 1 cucharada de zumo de lima y caldo de verduras o agua.
Elaboración:
- Pica la cebolleta y ponla a rehogar en una cazuela con un chorro de aceite durante unos 5 minutos, sin que llegue a coger color.
- Añade la zanahoria bien picada junto a la patata cortada en dados (y la calabaza igual si has decidido utilizarla).
- Sazona con sal y pimienta y añade el caldo para cubrir y un poco más.
- Cocina a fuego medio hasta que la patata esté lista y añade la nata líquida para que cocine durante 1 minuto más. Rectifica de sal y pimienta y termina de sazonar con aceite y el zumo de lima mientras trituras bien en robot o túrmix.
- Corta la carne de vieira longitudinalmente, para que de cada vieira salgan dos piezas. Pásalas por una sartén con un poco de mantequilla hasta que cojan un bonito color dorado. Sazona con sal y pimienta y sírvelas en el último momento con la crema.
Sopa picante de pollo con tallarines de calabacín
Ingredientes:
250 g de contramuslos de pollo deshuesados, 3 o 4 calabacines, 2 cebolletas, 1 puerro, ½ pimiento rojo, ½ pimiento verde, 1 tallo de apio, 1 lima, caldo de verduras, aceite de oliva virgen extra, ½ cayena (o más si la quieres más picante), sal, pimienta y unas hojas de perejil.
Elaboración:
- Picamos la cebolleta en juliana y la ponemos a dorar en una cazuela con un chorro de aceite. Antes que coja color añadimos los contramuslos salpimentados cortados en tiras y también los doramos. Añadimos la cayena, el puerro y la ramita de apio, cubrimos con agua o con el caldo de verduras para cocinar el pollo hasta que esté tierno pero intentando no pasarnos de cocción para que no quede fibroso.
- Mientras tanto cortamos en juliana los pimientos y la lima en gajos, los salpimentamos y salteamos brevemente en una sartén con un poco aceite. Han de quedar enteros, simplemente queremos quitarles el punto crudo.
- Preparamos los tallarines de calabacín: bien con un cortador de verduras de los que suelen vender en las ferreterías o tiendas de gadgets de cocina o bien con mucha (mucha) paciencia cortando a mano tiras lo más finas posible de calabacín.
- Para finalizar el plato, cuando el pollo ya está, retiramos el apio y el puerro de la cazuela y añadimos los pimientos, la lima y los tallarines de calabacín que se cocinarán con el calor residual. Rectificamos de sal y pimienta y ya podemos servir.