Las croquetas líquidas más famosas de Madrid, de Dis Tinto Taberna
/ Ingredientes.
Nº de comensales
1- 1,2 l de leche entera fresca
- 115 g de mantequilla
- 20 g de aceite de oliva suave
- 125 g de harina de trigo
- 150 ml de nata para montar
- 5 hojas de gelatina
- 170 g de taquitos de jamón muy picados
- Un hueso de jamón ibérico
- Harina abundante
- 4 huevos
- 300 g de pan rallado
- Aceite para freír
Conseguir unas croquetas líquidas no es tarea fácil: el proceso conlleva vigilar mucho la bechamel, equilibrar muy bien la receta, conseguir una fritura cuidadosa y no morir en el intento. En Dis Tinto Taberna, situada en la Calle Medinaceli de Madrid, estas croquetas líquidas se han convertido en su plato más vendido y en un icono de su oferta gastronómica.
Esta receta es sólo una aproximación a lo que podrían llegar a ser las de Dis Tinto, pero quedan igual de líquidas y, al menos, las podemos preparar en casa. Si queremos degustarlas en toda su gloria, deberemos visitar el restaurante... ¡El desplazamiento vale la pena!
/ Preparación.
Calentar la leche con la nata y el hueso de jamón dentro para que coja sabor, a fuego suave, para que nunca rompa a hervir.
Derretir la mantequilla con el aceite de oliva a fuego bajo. Añadir la harina y cocinar a fuego suave durante unos minutos hasta que la harina se cocine: debe hervir ligeramente pero no coger color.
Mientras, sumergir la gelatina en abundante agua fría y dejar en remojo durante 5 minutos.
Cuando la harina ya esté lista, agregar los taquitos de jamón y remover bien. Añadir entonces inmediatamente la leche y la nata y empezar a cocinar a fuego alegre durante 3 minutos. Entonces, bajar el fuego y seguir cocinando 10 minutos más al mínimo.
Cuando la masa esté lista, agregar la sal al gusto, escurrir la gelatina y añadirla también. Pasar a un recipiente y tapar con un film a contacto. Dejar enfriar completamente.
Cuando la masa esté totalmente fría, será el momento de bolear. Pasar las croquetas formadas por harina, por huevo y, para terminar, por pan rallado. Dejar reposar en la nevera durante 6 horas antes de freír.
Freír en abundante aceite de oliva templado hasta que se doren y empiecen a sonar. Retirar y dejar reposar sobre papel de cocina para que se pierda el exceso de grasa.