Ayuda a salvar el planeta poniendo en práctica la dieta climática
Aunque nunca te lo hayas planteado, debes saber que consumir una mayor cantidad de productos vegetales que animales, tiene efectos muy positivos no sólo en tu salud sino también en la del planeta. Ya que la conocida como dieta climática (climatarian), basada mayormente en el consumo de legumbres y vegetales, tiene un menor impacto ambiental. Hay que tener en cuenta que la mayor o menor aportación de estos alimentos al calentamiento global depende de las fases por las que éstos pasen hasta llegar a nuestro plato (producción, almacenamiento, elaboración, transporte, etc.). En todas estas etapas se liberan nocivos gases de efecto invernadero.
Se reconoce así como un verdadero problema la elevada ingesta de carne, sobre todo roja. Aquí entran en juego varios aspectos. Por una parte, las emisiones relacionadas con cualquier proceso industrial y, por otra, todos los recursos que se emplean para alimentar a los animales (deforestación de bosques para ampliar espacios de cultivo, fertilizantes, energía, agua, etc.). Además, algunos de estos animales, como por ejemplo las vacas, emiten metano en sus procesos digestivos o, lo que es lo mismo, un gas de efecto invernadero muy contaminante.
En este sentido, la ONG ecologista Amigos de la Tierra ha publicado recientemente un estudio en el que afirma que “la producción y consumo de productos de origen animal suponen el 45% de la huella climática del sistema agroalimentario en España. En concreto, 1,57 toneladas de CO2 equivalente por persona año”.
La dieta climática también opta por consumir, en la medida de lo posible, los alimentos crudos ya que, si no se cocinan, se ahorra energía y no se emite carbono. En el caso de optar por el cocinado, se recomienda hacerlo con una olla exprés (acorta tiempos) y prescindir del horno al ser uno de los electrodomésticos caseros que más energía consume.
Con todo esto, se recomienda una dieta basada en alimentos de temporada, de proximidad y de producciones ecológicas. Consume muchas frutas y verduras y cubre tus necesidades de proteínas con legumbres, soja y frutos secos.
Tal vez estemos ante la esperada dieta definitiva porque, como reza un conocido dicho popular “Somos lo que comemos”. Así que ya sabes, apúntate a la moda de la dieta climática, buena para ti y para el clima.