La panela: el edulcorante de moda
La panela gana adeptos a pasos agigantados en nuestro país. De un tiempo a esta parte se ha convertido en un producto fácil de encontrar en cualquier lineal de supermercado. Sus beneficios parecen ser muchos. Pero, ¿qué es exactamente la panela? Es un azúcar artesanal con muy poca transformación. Se extrae directamente del jugo de la caña de azúcar, a diferencia del proceso del azúcar convencional que se extrae de la remolacha. Posteriormente, a base de varias ebulliciones, pierde humedad formando una melaza. Es al enfriarse y secarse cuando la panela se solidifica y se corta rectangularmente en moldes de diferentes formas. Este proceso es libre de químicos por lo que el resultado es 100% natural. Además, al no haber sido refinada, no solo contiene sacarosa sino que conserva todos sus nutrientes, algo que también le diferencia del azúcar que es una gran fuente de carbohidratos. Así, la panea nos aporta también vitaminas del grupo A,B,C,D y E, minerales como hierro, fósforo, calcio, zinc y magnesio, y muchas menos calorías.
Beneficios de la panela
Esto se traduce en múltiples beneficios para la salud: reduce la glucosa en sangre al endulzar las comidas de manera natural; refuerza nuestra defensas ayudándonos al óptimo funcionamiento de nuestro sistema inmune, es perfecta para proteger nuestros huesos y dientes al ser rica en calcio; sirve para tratar la anemia y la falta de hierro y nos aporta energía de manera rápida e inmediata.
Contraindicaciones de la panela
Eso sí, no podemos perder de vista que, aunque la panela sea un edulcorante natural, este sigue conteniendo azúcar por lo que su consumo también debe ser moderado. Entre sus contraindicaciones: aumento de peso ya que, aunque tenga menos calorías que el azúcar blanco, sigue teniendo; a evitar por las personas que sufren de diabetes; altera la leptina, la hormona que regula la sensación de hambre y, por último, puede provocar la aparición de caries.
Hay que tener en cuenta que la panela endulza un poco más que el azúcar por lo que la cantidad a emplear debe ser menor. Siempre teniendo en cuenta que la Organización Mundial de la Salud (OMS) cifra la cantidad recomendada de su consumo al día en unos 25 gramos, lo que representa un 5% de la ingesta calórica diaria.
La panela se comercializa de maneras distintas, en bloque, en polvo o en pastillas. Su sabor dulce, y ligeramente anisado, hace que se emplee de maneras muy diferentes, aunque las más comunes son como edulcorante de refrescos, infusiones, confituras, mermeladas, chocolates, salsas, etc., y, como no, en infinidad de postres. Y para que pruebes la panela, si es que todavía no lo has hecho, te dejamos una receta de lo más veraniega y refrescante. ¡Toma nota!
Receta: agua de panela con limón
Ingredientes (para 4 personas):
1 bloque de panela de unos 500 gramos
5 limones o limas
2 litros de agua
Preparación:
- Hervir la panela en medio litro de agua hasta que ésta se disuelva.
- Una vez disuelta, echar en una jarra grande con 2 litros de agua. Dejar enfriar.
- Exprimir los limones. Colar y reservar.
- Triturar el hielo para servir en cada vaso.
- Poner los limones con la mezcla de la jarra y remover.
- Servir al gusto.