Las 5 terrazas más agradables para saborear la cocina donostiarra
"No existe modernidad sin una buena tradición", reza su lema. Nos encontramos ante uno de los bares más concurridos de la Parte Vieja, donde donostiarras y turistas se unen en perfecta simbiosis. Su agradable terraza, situada en la Calle Mayor y frente al vistoso pórtico de la basílica de Santa María así como en las faldas del monte Urgull, es una delicia para catar, sin duda alguna, sus raciones como el suculento pulpo con patatas rotas, sus pintxos de bacalao confitado al pilpil y sus carrilleras guisadas con su salsa.
No nos podemos olvidar, claro, de sus copas, a destacar, el popular gintonic. No en vano, el local es una mezcla de bar de pintxos, restaurante y bar de copas.
Por si esto fuera poco, las escaleras del pórtico de la iglesia sirven, además, como improvisada terraza ‘supletoria’ donde tomarte tranquilamente tu cervecita al sol.
Es el primer ‘Oyster bar & restaurant’ de la ciudad; y en pocos años Kata 4 se ha hecho un hueco en el mundo de la gastronomía donostiarra gracias al buen hacer del joven cocinero Ismael Iglesias.
De hecho, en su tranquila terracita podrás degustar una gran variedad de platos, entre otros, cómo no, su amplio abanico de ostras. Para los que quieran alguna otra cosa, recomendamos sus bocados, como la suculenta ventresca de Getaria con cebolleta; para compartir ideales son las famosas tostas de pan de cristal: pedid la de jamón y la de bacalao ahumado. Para los que deseen probar nuevos sabores, sin duda que vayan directamente a por su huevo a baja temperatura con mantequilla trufada, setas y piñones o sus destacadas alcachofas fritas con tartar de tomate y jamón.
Un moderno espacio que se encuentra en el centro de la ciudad, a cincuenta metros del río y del mítico hotel María Cristina, en un entorno agradable, peatonal y abierto. Una delicia para los que quieran disfrutar tranquilamente de su cocina entre amigos o familiares.
Su agradable terraza ha sido recientemente reformada con a los lados para protegerla del viento del Cantábrico, ya que este bar y restaurante italiano se halla a algo más de cincuenta metros de la playa de Gros. Un gran restaurante moderno donde en su terraza, sin duda, hay que pedir las ricas brochetas de langostinos y queso de cabra así como la de ternera a la barbacoa.
Una terraza ideal para disfrutar de su menú del día en familia; no en vano, se encuentra pegada a un parque infantil, donde los más pequeños disfrutarán de lo lindo. De entre su amplia carta, destacan sus suculentas ensaladas, ideales para degustarlas tras salir del trabajo para ir a la playa; o viceversa. Para compartir, con la pareja o grupo de amigos, por supuesto, pizza y pasta. Su especialidad italiana, triunfa.
En pleno centro de Donostia, este bar de toda la vida se encuentra en la mítica plaza Bilbao, donde una gran fuente decora el centro de este espacio rodeado de preciosas calles peatonales.
Una terraza agradable y tranquila, muy próxima al río Urumea, al precioso y nuevo centro cultural Tabakalera y alejada del gentío de otros lugares de la ciudad. En ella podrás tomarte tu pintxito o vinito con tranquilidad al sol o a la sombra.
¿Para comer? Muy típicos sus platos combinados a gusto de la clientela. Recomendamos, claro, el de pechuga de pollo, patatas y ensalada así como sus huevos fritos con bacon y patatas. Para los que deseen algo ligerito, sin duda, sus exitosas ensaladas de verano y para los más hambrientos, su menú del día, perfecto en calidad-precio, donde destacamos para probar su lengua al txakolí.
Situado en uno de los paseos más románticos y bonitos de la ciudad fuera del tradicional circuito turístico de las tres playas donostiarras, dispone de una enorme terraza que se asoma al río Urumea con dos tipos de mesas para disfrutar del acogedor y tranquilo ambiente del paseo. A diez metros del local se encuentran unas escaleras que dan acceso al pulmón de la ciudad: el parque urbano Cristina Enea.
Rodeado de jardines y árboles, en este bar y restaurante catalán que abrió sus puertas en 2005 podrás degustar unos suculentos arroces y fideuá por encargo así como sus amplias tablas de quesos, tostadas o ensaladas. Muy destacables su conejo con all i oli así como su salteado de habitas, butifarra negra y langostinos. Una gran opción para disfrutar también de un cuidado vermuth en ‘la otra’ romántica Donostia.