Una cena de premios, bienvenidas y Ferran Adrià
La Acadèmia Catalana de Gastronomia celebró su cena de Navidad incorporando a dos nuevos miembros: Josep Monge, del restaurante Via Veneto, que acogió el acto, y Ferran Adrià, que acababa de hacer de cicerone de los académicos en una visita a la exposición sobre su universo creativo que aún se puede ver en el Palau Robert de Barcelona. Exhibición del chef Carles Tejedor con un tartar de bogavante gallego con caviar del delta del Ebro, una reinterpretación des niu y una composición dulce con castañas del Montseny. Vinos y cavas de Freixenet, Torres, Sumarroca, Torelló y Vila Viniteca. Se anunciaron los ganadores de los premios 2012 de la Academia. Restaurando del año: Aligué de Manresa (id a probarlo que es capaz de hacer el Benvi con la trufa negra). Cocinero joven: Víctor Quintillà, del Lluerna de Santa Coloma (últimamente todo le sale bien, y lo tiene muy merecido). Emprendedor: José María Parrado, propietario del Bar Cañete (donde tan bien cocina Josep Maria Massó). Profesional del año: Jaume Tàpies, del Hotel el Castell de Ciutat (y presidente de Relais & Châteaux). Acontecimiento gastronómico del año: Banco de los Alimentos (cualquier calificativo es poco). Premio Especial de la Academia: Juli Soler (¡cómo te queremos, Juli!). Y premio especial a título póstumo al periodista Pau Albornà, a quien también acaba de otorgar uno la Asociación Vinícola Catalana (¡cómo te echamos de menos, Pau!). Foto de la ACG