Alimentos afrodisíacos: qué hay de realidad y qué de leyenda
Se suele considerar afrodisíaco a todo aquello que estimulando los sentidos potencie el deseo o rendimiento sexual. Estos deben crear el deseo sexual, no se trata de mejorar el rendimiento y la capacidad. Para eso ya existen las famosas pastillas azules que los expertos no consideran afrodisíacos.
La enciclopedia Británica define “Afrodisíaco”, como cualquiera de las diversas formas de estimulación pensadas para despertar la excitación sexual. Se pueden clasificar en dos grupos principales: (1) psicofisiológica (visual, táctil, olfativo, auditivo) e (2) interna (derivados de los alimentos, las bebidas alcohólicas, drogas, pociones de amor, preparaciones médicas). Por otro lado, tenemos la conocida erótica del poder; el diplomático y hombre de Estado Henry Kissinger afirmaba que el poder es el afrodisíaco supremo.
Se ha escrito mucha literatura al respecto. No en vano la comida y el sexo son motores de la humanidad desde que el mundo es mundo. El folclore popular recoge cientos de afrodisíacos que por otro lado no tienen mucha base científica. La mayor parte de los estudios que se han llevado a cabo se han realizado sobre medicamentos u hormonas para mejorar la disfunción eréctil masculina.
Un poco de historia
La mitología griega nos narra cómo Afrodita, la diosa griega del amor, fue engendrada en una ostra en el mar. Esta diosa, conocida como Venus en el mundo romano, se ha vinculado siempre al erotismo, la sensualidad, el placer y la fecundidad.
Se dice que la primera vez que se habló de afrodisíacos fue en unos papiros egipcios de los años 2200 y 1700 a.C. En el antiguo Egipto, la miel era utilizada para curar la esterilidad y la impotencia. Los recién casados de la antigua Persia bebían aguamiel cada día durante el primer mes después de casarse (de ahí viene la conocida "luna de miel”). Tablillas cuneiformes del 800 AC recomendaban a los babilonios cortar la cabeza a una perdiz, comer su corazón y drenar su sangre en un vaso de agua, dejar reposar la mezcla durante la noche y beberla a la mañana siguiente para aumentar su virilidad.
En la Biblia (Génesis), se menciona cuando Leah intercambia mandrágoras con Raquel. Estas se nombran de nuevo en el Cantar de los Cantares, pues se creía que estimulaba la fertilidad de las mujeres.
El médico griego Galeno (Pérgamo, 130-Roma, c.200/216) escribió acerca de alimentos afrodisíacos tildándolos de "cálidos y húmedos" y también "ventosos”, pues creía que los alimentos que causan flatulencias eran necesarios para causar la erección. Se cuenta que Hércules bebía un líquido elaborado con esencia de orquídea para incrementar su vigor sexual. Los antiguos griegos y romanos utilizaban la albahaca, el romero, el azafrán, la miel, las uvas y los piñones como potenciadores de su sexualidad.
El libro indio Kama Sutra, alude a los afrodisíacos, y por ello fomenta el consumo de garbanzos y la unción de los genitales con pimienta negra, polvo blanco de “dhatūrā” ("manzana espinosa") y miel. Esta mezcla tiene pinta de ser tóxica (quedáis advertidos).
En su obra Suma Teológica del siglo XIII, Santo Tomás de Aquino, describía los alimentos afrodisíacos como aquellos que contribuían a una buena nutrición y a un "espíritu vital", hablando en concreto de la carne y al vino.
El comercio de las especias provenientes de Asia hizo que en la Europa del siglo XIV os registros históricos sugirieran que el clavo, las semillas de anís, la canela, el jengibre, la pimienta blanca, el cardamomo, y el tomillo tenían propiedades afrodisiacas.
Montezuma compartió aguacates con Hernán Cortes, pues ya los aztecas explicaban que su nombre, ahucatl (que significaba testículo), provenía no sólo de su forma sino de la habilidad para incitar a la pasión sexual. Su creencia llegaba a tal punto que los aztecas no permitían a las mujeres vírgenes salir de casa en la época de cultivo del fruto. Luis XIV también recurrió al aguacate para revitalizar su líbido.
El médico español Antonio Colmenero de Ledesma, escribió sobre el chocolate que "... incita vehementemente a Venus, produce concepción en las mujeres, y acelera y facilita su entrega..." en su libro Curioso Tratado de la Naturaleza en 1631.
Se cuenta que el Marqués de Sade, conocido por sus relatos eróticos y muy aficionado a los afrodisíacos fue detenido a finales de 1770 por los tribunales franceses al ofrecer en una de sus fiestas chocolate cubierto de “Mosca española” (que trataremos adelante) provocando la intoxicación de una de las asistentes. Asimismo, el conocido Casanova del siglo XVIII desayunaba cincuenta ostras para aumentar su potencia sexual.
¿Cuál es el efecto de los afrodisíacos en nuestro cuerpo?
Cuando percibimos algo sexualmente estimulante nuestro cuerpo reacciona de la siguiente manera: en primer lugar, se envían señales desde el lóbulo límbico del cerebro a través del sistema nervioso en la región pélvica. Estas señales provocan que los vasos sanguíneos se dilaten. Esta dilatación crea una erección en hombres y mujeres (los tejidos eréctiles femeninos se encuentran en el clítoris y la región alrededor de la entrada de la vagina). Este proceso se acompaña de taquicardia. Nuestros cerebros liberan sustancias como la norepinefrina y dopamina, neurotransmisores que indican que se trata de una sensación placentera. Los expertos dicen que los afrodisíacos pueden funcionar de dos maneras:
- Los que producen el deseo sexual a través de la mente.
- Los que producen el deseo, afectando partes del cuerpo. Por ejemplo, algo que aumente el flujo sanguíneo en los órganos sexuales o que haga que nuestro cuerpo segregue sustancias químicas asociadas con el deseo sexual.
Los investigadores han descubierto que algunos alimentos, hierbas y otros suplementos estimulan la producción de hormonas u otros productos químicos que afectan la libido. Al mismo tiempo desconocen si esos productos químicos se producen en una cantidad suficientemente alta como para que podamos apreciar realmente la diferencia. No hay mucha investigación al respecto, sobre todo porque la libido es una materia un tanto difícil de estudiar.
¿Funcionan?
La doctora Janice B. Swanson, de la prestigiosa clínica Mayo de EEUU insiste en que hay poca evidencia que respalde la eficacia de la mayoría de las sustancias presentes en afrodisíacos naturales. Si bien no hay nada nocivo en experimentar con la mayoría de los alimentos para ver si son afrodisíacos naturales eficaces, uno debe ser consciente de que algunos suplementos que contienen extractos de insectos o plantas pueden ser tóxicos.
Por ejemplo, la “mosca española”, un afrodisíaco natural comúnmente promocionado, puede causar daño renal y sangrado gastrointestinal. Muy pocos alimentos han demostrado científicamente sus efectos libidinosos en ciertas partes del cuerpo distintas del estómago tal y como atestiguan informes de la Food and Drug Administration (FDA) de Estados Unidos.
Sin embargo se han realizado estudios para medir la respuesta sexual a la alimentación, a los que se une la creciente investigación por chefs y académicos sobre las conexiones entre aroma, comida, emociones y experiencia sensual. El recuerdo nostálgico desencadenado por olores, conocido como el “Efecto proustiano”, ha sido adoptado por algunos chefs que creen que comer debe ser una experiencia sensorial completa, que implique el gusto, el olfato e incluso el sonido. Algunos alimentos tienen cierta base científica como afrodisíacos pero la mayor parte suelen ser placebos que funcionan por medio de la sugestión.
Cuando Cupido utiliza el tenedor
En este artículo nos vamos a centrar en algunos de los afrodisíacos comestibles. Toma nota si lo que deseas es prepararte para un buen día de los enamorados en pareja. A continuación vamos a analizar todos los alimentos que se consideran afrodisíacos.
Existen importantes diferencias entre las culturas acerca de qué tipo de alimentos se consideran placenteros. Rachel S. Herz, experta en la psicología del olfato, escribió en su libro The Scent of Desire (William Morrow, 2007) que "los asiáticos consideran que el olor del queso es horrible, pero los occidentales lo consideran como un alimento de suntuosa indulgencia”.
A algunos se les atribuye el carácter de afrodisíaco por sus propiedades, a otros por su forma (su parecido físico con los órganos reproductivos humanos) y se dice también que algunos son más efectivos en hombres que en mujeres o viceversa, aunque hay muchas contradicciones al respecto.
-Aguacate: El aguacate es una fuente rica de vitamina E que ayuda al cuerpo en la producción de hormonas como la testosterona, el estrógeno y la progesterona. Estas hormonas circulan en el torrente sanguíneo y estimulan las respuestas sexuales, tales como hinchazón del clítoris y la lubricación vaginal.
-Ajo: Contiene alicina, que aumenta el flujo sanguíneo y produce oxido nítrico.
-Alcohol: En pequeñas dosis. Se debe tener en cuenta la advertencia de Shakespeare en Macbeth: "provoca el deseo, pero impide el rendimiento."
-Almendra: Estos frutos secos están repletos de grasas esenciales que regulan las prostaglandinas, vitales para la producción de hormonas sexuales. Asimismo contienen vitamina E, que ayuda a producir un esperma más potente gracias a sus antioxidantes.
-Apio: Los romanos ya lo usaban como afrodisíaco. Contiene gran cantidad de las feromonas llamadas androstenona y androstenol, que se cree que atraen a las mujeres.
-Avellanas: Turquía ha cultivado avellanas desde el año 300 A.C. El pueblo turco ha creído siempre en su efecto afrodisíaco.
-Azafrán: La Universidad de Guelph (Canadá) comprobó que esta planta ayuda a mejorar el desempeño sexual de los varones, así como la calidad y duración de las erecciones. Además, de combatir la impotencia, el azafrán también es útil para retrasar la eyaculación y alargar el coito. Desde tiempos inmemoriales fue utilizado como afrodisíaco por sirios, griegos, fenicios, árabes, etc. Según dicen estimula el útero y la circulación sanguínea.
-Cebolla: Los sacerdotes egipcios célibes no podían consumirla, ya que se creía que era un afrodisíaco, y su efecto potencial no estaba permitido. Al igual que el ajo, aumenta la circulación sanguínea.
-Chile: Acelera el pulso e induce la sudoración, imitando el estado de excitación sexual y contiene capsaicina que provoca la liberación cerebral de endorfinas, de acuerdo con Meryl S. Rosofsky, doctor y profesor adjunto en del departamento de nutrición, estudios alimentarios y salud pública en la Universidad de Nueva York.
-Chocolate negro: Los investigadores han encontrado beneficios vinculados al consumo de chocolate, en porciones moderadas, incluyendo el alto contenido en PEA (feniletilamina) que libera endorfinas y serotonina. Se debe elegir los que contengan al menos 65% de cacao.
-Espárragos: Los espárragos son ricos en potasio y calcio, lo que ayuda a la producción hormonal y eleva los niveles de energía. También son ricos en vitamina E, lo que mejora el flujo sanguíneo a los genitales.
-Granada: La granada es rica en antioxidantes que mejoran el flujo sanguíneo y favorecen la erección. Un estudio que apareció en abril de 2007 en la revista International Journal of Impotence Research descubrió que el 47% de los hombres que consumieron zumo de granada durante dos períodos de cuatro semanas con una interrupción de dos semanas entre los dos períodos, informaron que tuvieron mejoras en la erección.
Investigadores de la Universidad de California, Los Ángeles, y la Clínica del Hombre en Beverly Hills, California, atribuyeron la mejora a las propiedades antioxidantes de la granada, que ayudan con la circulación sanguínea. Más recientemente, en 2011, un estudio de la Universidad Queen Margaret de Edimburgo descubrió que beber zumo de granada cada día reduce los niveles de cortisol, que a su vez provoca el aumento de la testosterona en los hombres y las mujeres.
Según un estudio realizado por la Universidad de Guelph (Canadá), la raíz del ginseng en cualquiera de sus presentaciones es un tónico energético que, según estudios realizados, mejora el desempeño sexual hasta en un 42%.
-Higos: Están llenos de antioxidantes, flavonoides, fibra y potasio. Son la última paradoja en los alimentos sensual. Se rumorea que era la fruta favorita de Cleopatra.
-Huevos: Los huevos son una fuente de L-arginina, que actúa sobre las enzimas y aumenta la producción de óxido nítrico.
-Jengibre: Un estudio publicado en la revista Phytomedicine, probó que las ratas machos a las que les dieron jengibre experimentaron un aumento de peso testicular. Se cree que el jengibre podría tener un efecto similar en los niveles de testosterona humana.
-Miel: Hipócrates la prescribía para el vigor sexual. La miel contiene boro, que puede regular los niveles hormonales, y óxido nítrico, que se libera en la sangre durante la excitación. Es también un símbolo de la fertilidad y la procreación en algunas culturas.
-Melocotones: Tienen un contenido alto de vitamina C, que se ha demostrado que aumenta el recuento de espermatozoides y reduce la agrupación de los mismos.
-Ostras: En 2005, un grupo de científicos italianos y estadounidenses encontraron que los aminoácidos de las ostras y los mejillones desencadenan la producción de hormonas sexuales en ratas. Esta sería la primera evidencia científica de que el más famoso afrodisíaco en el mundo, al menos en parte, merecía su reputación. Las ostras contienen una enorme cantidad de zinc, que beneficia la función reproductora y fomenta la liberación elevada de hormonas sexuales.
-Piñones: Los piñones se han utilizado para estimular la libido desde la época medieval. Al igual que las ostras, ellos también son ricos en zinc. Galeno recomendaba comer cien piñones antes de ir a la cama.
-Plátano: Contiene un alcaloide llamado bufotenina, que mejora el estado de ánimo y es rico en potasio y vitamina B, necesario para la producción de hormonas.
-Regaliz: En la antigua China, la gente solía comer regaliz para potenciar la pasión y la lujuria. El olor parece ser particularmente estimulante. Alan R. Hirsch, MD, director neurológico del Smell & Taste Treatment and Research Foundation en Chicago, realizó un estudio que analizó cómo diferentes olores estimulan la excitación sexual. Descubrió que el olor de regaliz negro aumentaba el flujo de sangre hacia el pene por 13%. Ojo, porque cuando se combinó con el olor de los donuts, ese porcentaje subió... ¡al 32%!
-Sandía: Estudios científicos de Texas EEUU llevados a cabo por el Dr. Patil Bhimua de Texas A&M, que dirige el Fruit and Vegetable Improvement Center en la Universidad en College Station, han descubierto que esta fruta contiene citrulina, convertida posteriormente y gracias a las enzimas en arginina, que disparan la producción de óxido nítrico, un compuesto que relaja los vasos sanguíneos del organismo.
-Semillas de calabaza: Tienen una gran cantidad de zinc. Un estudio holandés ha revelado que los suplementos de ácido fólico y zinc aumentan el número de espermatozoides en un 74% en los hombres con problemas de fertilidad.
-Trufa: Su aroma contiene alfa-androstetenol, que reproduce el olor de las feromonas, las hormonas responsables de la atracción física.
-Vainilla: Según la Fundación de Investigación y Tratamiento del Olfato y el Gusto de Chicago (EE.UU.), la vainilla puede aumentar el flujo sanguíneo al pene.
-Raíz de maca: Es una importante fuente de aminoácidos y contiene Vitaminas B1, B2, B12, C, E y carotenos. Fue descubierta por los incas y se dice que aumenta la libido, la energía y la sensibilidad en el clítoris.
-Remolacha: Los antiguos romanos creían que la remolacha y su jugo suscitaban sentimientos amorosos. Frescos sobre la remolacha decoran las paredes del burdel “Lupanare” en Pompeya. En la mitología griega, Afrodita comía remolacha para mejorar su atractivo. Este pintoresco folclore en realidad tiene alguna base en la realidad. Las remolachas son una fuente natural de triptófano y la betaína, sustancias que promueven una sensación de bienestar. También contienen altas cantidades de boro, un mineral que aumenta el nivel de hormonas sexuales en el cuerpo humano.
Los afrodisíacos más extraños
A lo largo y ancho del globo terráqueo encontramos afrodisíacos de lo más insólitos como:
- Yarsagumba: Es un hongo conocido como “viagra del Himalaya” que se desarrolla en las larvas de la polilla murciélago y las ataca hasta momificarlas. Es popular en la medicina tradicional china.
- Mosca española: Se trata de un brillante escarabajo verde del sur de Europa. La mosca, o cantharides, se fabrica con restos de escarabajos secos y puede ser uno de los afrodisíacos más peligrosos en el mercado. La excitación sexual se inicializa desde la irritación de las vías urinarias y los genitales, que producen un torrente de sangre a los órganos sexuales. Mejor evitarlo.
- Sangre de cobra (China, sudeste de Asia, Filipinas): Atrapar, matar y luego beber la sangre de una cobra para aumentar el deseo sexual, es una tradición cantonesa que data del 205 A.C.
- Un manjar rural y afrodisíaco en Jamaica consiste en un caldo a base de ron lleno de plátanos, chiles y los genitales del toro.
- Huevo fetal de pato (Filipinas, el sudeste de Asia)
- Guisado de Cocodrilo (Tailandia)
- Carne de lagarto (África del Norte): El erudito romano Plinio el Viejo puede ser responsable de dicha creencia. En su Historia Natural, indicó que ciertas partes del lagarto se deben empapar en vino y beber para mejorar el apetito sexual.
- Hormigas cortadoras de hojas (América del Sur): Regalo de matrimonio a los recién casados desde tiempos precolombinos, se piensa que estos insectos de dos centímetros de largo pueden añadir algo más que centímetros al desempeño sexual del hombre.
- Tarántulas fritas (Camboya): Las arañas, a menudo tan grandes como la palma de la mano de un hombre, se mezclan típicamente con MSG, azúcar, sal y ajo, y luego se fríen hasta estar crujientes por fuera pero empalagosas en el interior.
- Ámbar gris (Europa, Oriente Medio, China): Es una sustancia sólida, cerosa, regurgitado o defecado por cachalotes, se utiliza principalmente como fijador en perfumes. Del siglo XV al XIX era un afrodisíaco popular. Algunas culturas de Extremo Oriente todavía utilizan el ámbar gris para este propósito.
- Pene de Tigre: La medicina tradicional china dice que comer el miembro de este animal salvaje aumenta la resistencia masculina.
-Pepino de mar: Se considera un manjar afrodisíaco en China.
- Té de malunggay (Filipinas): Popular bebida conocida por eliminar toxinas al igual que por inducir el “sentimiento amoroso”.
- Cuerno de rinoceronte: El polvo obtenido de él era muy popular entre los chinos hace 1000 años y se espolvoreaba sobre las comidas para mejorar la disfunción sexual en los hombres. Actualmente está prohibido en Asia.
El poder de la mente y un estilo de vida saludable
A estas alturas nadie puede dudar que ciertos fármacos potenciadores de la función sexual puedan tener una gran cantidad de efectos secundarios peligrosos. Son muchos los expertos que consideran preferible utilizar la vía natural para tener una vida sexual sana: una buena alimentación, ejercicio, exposición al sol, un descanso adecuado y sobre todo una mente positiva y preparada para el “juego”.
Muchos de los alimentos que hemos visto contienen propiedades que aportan energía al cuerpo y disminuyen o aumentan la presión arterial. Eso puede ayudar, cierto, pero muchos se inclinan a pensar más en su ‘efecto placebo’ y la sugestión que crean en la mente. Porque queridos lectores, no hay nada más poderoso que la mente. La escritora Isabel Allende ya decía que: “Para las mujeres el mejor afrodisíaco son las palabras, el punto G está en los oídos, el que busque más abajo está perdiendo el tiempo.” Por supuesto hay viejas técnicas que no fallan, como derrochar encanto y sentido del humor.
Cualquier alimento que una persona se proponga, puede ser afrodisíaco. Muchos alimentos se consideran estimulantes sexualmente por ser alimentos suaves, ricos, cremosos, exóticos, picantes o simplemente por ser artículos de lujo que no están al alcance de todos. Por otro lado, una comida o cena abundante en pareja produce más bien el efecto contrario a un vigorizante sexual y puede llegar a provocar un sopor invencible. Los extremos nunca son buenos.
Es recomendable seguir la famosa frase de “eres lo que comes”. Tu olor corporal puede depender en gran parte de lo que comes. Por ejemplo la miel o las frutas dulcificarán tu olor y aumentaran tu atractivo.
Para que podáis reflexionar sobre todo lo expuesto os dejo una canción de la cantante de jazz Katie Melua que cantaba My Aphrodisiac Is You: