El pollo amarillo catalán es el protagonista de Coock Slow Food Chicken. Un pollo marinado durante 48 horas con más de una veintena de especias y hierbas aromáticas, que cocinan al carbón vegetal durante más de dos horas en un horno a la vista.
El pollo a l'ast, del que sirven media ración o entera, es el plato estrella de este local, situado en Sant Cugat del Vallès (Barcelona) y abierto de miércoles a domingo. Puede acompañarse con patatas fritas o asadas a las finas hierbas.
Carrer Josefina Mascareñas, 15
Sant Cugat Barcelona
España
Alma de restaurante con take away
El pollo también es el ingrediente principal de la mayoría de elaboraciones de este asador-restaurante, que abrió sus puertas hace dos años, en plena pandemia. Lo hizo con servicio para llevar, pero ahora dispone de una amplia terraza exterior, con capacidad para más de una veintena de personas. "Coock es un local de cocina tradicional catalana. Tiene alma de restaurante, fusionado con take away", cuenta Eduard Tomàs, chef y propietario de este y otros locales.
Tanto para degustar en terraza como para llevar, el local ofrece distintas propuestas para compartir, como unos fingers de pollo con salsa barbacoa o una burger crispie, con pollo, queso brie, rúcula y una salsa que elaboran ellos, acompañada de patatas fritas.
El pollo también está presente en platos como las alitas con salsa barbacoa picante, el canelón XXL de pollo trufado con salsa bechamel y queso rallado, el croquetón de pollo trufado o los macarrones con ragú de pollo y parmesano. Deliciosas propuestas para compartir en una carta que también incluye anillas de cebolla picante, burrata con tomate semiseco y rúcula, distintas variedades de empanadas argentinas o pato confitado con manzana, cebolla caramelizada y foie. Las bravas Coock son otro de los puntos fuertes de la carta. Las elaboran con alioli de mortero, salsa cajún y hoisin.
Venden productos locales y renuevan platos cada semana
En clave dulce, tienen distintos postres caseros, expuestos en un mostrador. El cheesecake casero, muy cremoso y con crumble de galleta y mermelada de frutos rojos, es uno de los más demandados. También se pueden degustar un tiramisú y helados de distintos sabores en este local que simula un gallinero y, a su vez, es una tienda con productos locales de primera calidad. Varias estanterías exponen conservas, especias, aceites, arroces, snacks, pasta, mermeladas, panecillos, legumbres y otros productos que pueden disfrutarse en la terraza o comprarse para llevar.
Quienes prefieran una opción más convencional, disponen de un menú por 11,50 euros, a partir de las opciones de la carta. Está disponible los jueves y viernes al mediodía e incluye primero, segundo, postre y bebida. El local también ofrece platos nuevos cada semana, como paella, caracoles, pimientos rellenos, berenjenas rellenas y distintas ensaladas, que tienen a la vista en el mostrador.
A esta variada propuesta casera, se suma un precio muy asequible y una atención personalizada, que hacen que Coock tenga una clientela muy fidelizada. Familias y amigos se reúnen en la terraza del local o recogen los platos para llevar y disfrutar de elaboraciones sin prisas.
Fotos: Marta Becerra