El Colmadito de Sarrià

El barrio de Sarrià, que conserva el encanto del pueblecito que fue hasta no hace tanto, ha ganado un nuevo rincón gastronómico imperdible. Se trata de El Colmadito de Sarrià que abrió puertas el pasado mes de junio gracias a la ilusión y la entrega de Alejandra Oller y Pablo López.

Se proponían abrir un local donde poder vender y degustar el queso Payoyo, una especialidad que conoce mejor que bien Pablo, ya que es familiar directo de uno de sus fabricantes, Andrés Piña, que hace ya 20 años creó esta marca junto a Carlos Ríos. Procedentes de Cádiz, esta variedad de queso no ha parado de ganar adeptos hasta convertirse en una delicia gourmet conocida por los amantes del queso.

“He mamado lo que es el queso Payoyo desde pequeño: he ayudado a hacer queso, he estado trabajando con ellos descargando cajas, levantándome a las 5 de la mañana cogiendo cubas de leche, ordeñando cabras... en todo el proceso en general. Sé lo que es”, cuenta Pablo ilusionado. Su ambición era, junto a Alejandra, poder degustar y vender este queso en Barcelona y no han parado hasta encontrar el sitio idóneo.

Este es un pequeño y acogedor local de la calle central de Sarrià, Major de Sarrià, en el que diversas barras, mesas altas y un interior más recogido, además de una pequeña terraza exterior, permiten dejarse seducir por el placer de tomar unas tapas de calidad en buena compañía. Junto a la entrada, un aparador no deja lugar a dudas de la calidad de las conservas y quesos que se sirven en el local.

Funciona como punto de venta de productos gourmet y tras el cristal podemos encontrar ventresca en aceite de oliva Baelo, tronco de atún rojo salvaje de Almadraba GADIRA o conservas Angelachu (mejillones en escabeche, navajas en aceite de oliva, filetes anchoa en aceite oliva, sardinilla, entre otros). En el apartado de los quesos, cualquier combinación mientras sea Payoyo: cabra curado, oveja curado, cabra y oveja curado, oveja y cabra semicurado... Y también bloc de foie al Pedro Ximenez y mousse de foie.

Un imperdible del Colmadito es su jamón cortado a mano y al momento. Se trata de un ibérico de bellota Maldonado de Badajoz, curado 4 años, sutil en boca, con la grasa que se deshace, gustoso y untuoso. Merece ya de por sí una visita.

En El Colmadito de Sarrià la carta está pensada para compartir y picotear. Así, nos encontramos con unas croquetas caseras de jamón, con tablas de quesos Payoyo (por supuesto) y de Chacinas Maldonado (lomo ibérico de bellota, chorizo y salchichón ibéricos y morcilla ibérica) o con la tabla de foie de pato 100% con mermelada casera y tostadas de pasas y nueces. Los pinchos de sobrasada, de anchoa y el matrimonio, son algunos de los must del local.

Pero este pequeño restaurante ofrece también carnes a la brasa y un menú degustación de mediodía, formado por 7 platos. Se puede optar también por el menú diario de mediodía, con entrante, primero, segundo y postre.

Y hablando de postre, como no podría ser de otra manera, el Colmadito cuenta con un reclamo único: ¡su tarta de queso Payoyo! Por todo ello, auguramos mucha suerte a este restaurante y a esta pareja de jóvenes emprendedores. No ha podido con ellos ni la pandemia.

Fotos: Flaminia Pelazzi.