Espai Seda

Primero una visita al museo y después una excelente comida. Este es el reclamo que atrae diariamente a centenares de turistas, tanto valencianos como de cualquier otra parte del mundo, a este edificio que comenzó a rehabilitarse en el 2014 y que hace tan sólo unos meses reabrió sus puertas en Valencia.

En Espai Seda cuentan con una propuesta inspirada en la gastronomía valenciana. Influenciados por la historia del entorno, su carta refleja la tradición combinada con las últimas tendencias en cocina haciendo de esta fusión una experiencia gastronómica única. 

Así, el plato que diariamente no falta en el menú es el arroz, cereal valenciano por excelencia, en cualquiera de sus versiones: paella, arroz a banda o del senyoret, entre otros. Aunque uno de los más curiosos que se ofrecen en el restaurante es una versión del conocido como ‘arròs passejat’ (arroz paseado). Se trata de una especie de arroz al horno que debe su nombre a que antiguamente al no existir horno en los hogares, las mujeres solían preparar el arroz en casa y llevarlo a un horno de leña a cocer. Así, por el trayecto que éste realizaba, se le conoce por este nombre.

A este fiel reflejo de la tradición, se suma un lado más vanguardista donde los aires, las cocciones a baja temperatura y esferificaciones dan lugar a entrantes nada convencionales como la versión en bote de la croqueta chop suey (un plato de origen chino que mezcla carnes y verduras cocinadas en wok).

Su horario, de 9:00 a 20:00 horas, permite ofrecer no sólo un menú del día sino también desayunos y almuerzos populares. Entre éstos últimos, el más demandado de sus bocadillos es el de la casa: carrillada, cebolla en tempura y piparra.

Su propuesta culinaria se completa con las ‘Meriendas Espai Seda’, donde los tan de moda zumos détox y las crepes tanto dulces como salados cierran una jornada perfecta.

Además, como no, su entorno privilegiado también es un plus porque no siempre se tiene la oportunidad de disfrutar de unas vistas tan excepcionales como éstas. Por eso, este restaurante es una buena apuesta tanto para deleitarse por los platos de aires mediterráneos de su chef, Gonzalo Bosch Marquina, como para relajarse mientras se observa cómo atardece sobre la ciudad.

El Museo

Por su parte, el Museo del Arte Mayor de la Seda permite al visitante conocer todos los secretos acerca del mundo de la seda y la importancia que ésta tuvo para la ciudad a finales del siglo XVIII, donde se calcula que la mitad de la población trabajaba en actividades relacionadas con la misma. De hecho, el mismo archivo histórico recoge que en 1767 se llegaron a contabilizar cerca de 5.000 telares en activo.

La propuesta expositiva se completa con una tienda de factura artesanal donde comprar artículos exclusivos, todos ellos realizados en seda por el colectivo de maestros sederos de Valencia. Unos textiles cuidadosamente elaborados y tratados que dan lugar a las telas que se lucen en el traje regional de la ciudad durante las Fallas. En esta ocasión, tuvimos el placer de encontrarnos en estas instalaciones con las 13 máximas representantes de la fiesta del 2017.

Así que ya sabes, si estás por Valencia y quieres disfrutar al mismo tiempo del placer artístico y culinario, no dejes de visitar la sede gremial más antigua de Europa.