Originales, muy apetecibles y preparados con mimo. Los bocadillos son la esencia de Midó, que significa almidón en castellano y hace referencia al ingrediente principal de la harina de trigo, con la que se elabora el pan, la base de sus especialidades. Desde España hasta Estados Unidos, pasando por Noruega, Uruguay, India o Vietnam, en Midó preparan bocadillos de cualquier rincón del mundo con productos de primera calidad, guisos elaborados, salsas caseras y distintos panes artesanos del día. "Midó nace con el objetivo de ofrecer una carta con bocatas emblemáticos de todo el mundo", explica Lluís Vilaplana, cocinero y uno de los socios del restaurante, que abrió sus puertas en 2017 en Matadepera (Barcelona).
El éxito fue tal que, desde julio del año pasado, Midó tiene su réplica en el centro de Terrassa, en un amplio local con mesas de madera, lámparas hechas a mano con ramas de árboles, paredes que ilustran iconos del mundo como La Pedrera, la torre Eiffel o el London Eye, y una bonita y original exposición fotográfica de niños con originales mascarillas. Midó también cuenta con una agradable terraza con techo de cañas, donde se puede disfrutar de su variada oferta gastronómica o de unos cócteles en buena compañía.
Opciones veganas y sin gluten
Entre sus propuestas culinarias, destaca Bahn Mi, un bocadillo a base de panceta confitada, pepino, pepinillos, tomate, cebolla, cilantro, cacahuetes y salsa Hoisin. "Es una receta vietnamita con influencia francesa", detalla Vilapana, quien también prepara la versión vegana de este delicioso bocadillo, cambiando la panceta por tofu.
Si saltamos de continente y nos trasladamos a México, podremos saborear Cemita, una de las propuestas estrella de Midó. Este bocadillo, originario de Puebla, se elabora con pechuga de pollo rebozado, queso Gouda, guacamole, jalapeños picantes, cebolla fresca, tomate y cilantro. Una explosión de sabores y texturas concentradas en un bocadillo XL con pan de hamburguesa. Los tacos no faltan entre las especialidades mexicanas. Los hay de cochinita pibil, langostinos a la plancha y panceta confitada.
Al norte de ese país se sitúa Estados Unidos, cuya gastronomía también está muy presente en Midó. Además de distintas burgers de ternera y una opción vegana, también se puede disfrutar del Pulled pork, otro de los grandes reclamos del local. Esta hamburguesa, también disponible en versión sin gluten, alberga en su interior una generosa ración de cerdo cocinado a baja temperatura durante 10 horas y condimentado con varias especias que le dan un toque agridulce. La col lombarda y los pepinillos en vinagre, dos ingredientes frescos y crujientes, también rellenan esta burger de etiqueta. En clave gourmet, preparan una reinterpretación del clásico lobster roll de Boston, que elaboran con gambas a la plancha, cogollos, apio, cebolla, alcaparras y mayonesa de limón. El choripan argentino y el chivito uruguayo tampoco faltan entre las propuestas americanas de su carta.
Del panino italiano al bocadillo de calamares
En versión europea, elaboran el típico panino italiano (a base de mortadela de Bolonia, queso gorgonzola fundido, nueces y rúcula) y el nórdico de Noruega (con salmón marinado, lechuga, pepino, alcaparras, cebolla, tomate y mayonesa de limón), además del steak tartar, que sirven como bocadillo y también como entrante, acompañado de tostaditas. Y, entre las propuestas españolas, no faltan el clásico pepito, con ternera, queso Gouda, pimiento verde, beicon y mostaza, y el popular bocadillo de calamares, con producto nacional de primera calidad, cebolla morada curtida y mayonesa de limón.
Estos bocatas con sello internacional pueden ir acompañados de bravas, patatas fritas con queso de oveja y romero, nachos con guacamole, croquetas caseras y hummus de lentejas, entre otros entrantes. Las cuatro ensaladas que preparan en Midó también son una interesante (y saludable) propuesta. Como broche final, ofrecen varios pasteles caseros, siendo el cheesecake con base de galleta y mermelada de frambuesas el rey de los postres y una opción muy demandada para llevar. Todas sus especialidades las preparan en un obrador de Terrassa, donde tienen la cocina central, y desde allí las distribuyen a sus dos locales.
Originales propuestas para llevar
El take away y el delivery siguen funcionando muy bien en Midó, que ofrece para llevar distintas pizzas envasadas al vacío. "No es la clásica de jamón y queso, sino pizzas elaboradas con recetas originales e ingredientes como cochinita pibil, calabaza rustida o sobrasada mallorquina", destaca el cocinero y empresario.
Para disfrutar en casa, también han creado unas cajitas con productos y panes que elaboran en su obrador y envasan al vacío. "Son unos packs para 4 personas que incluyen los ingredientes de cada bocadillo, para que cada uno se lo pueda montar en su casa. Vienen con unas pequeñas instrucciones para disfrutar al máximo de nuestros bocadillos", explica Vilaplana. Opciones variadas y suculentas para saborear estos bocadillos en los locales de Midó o en casa.
Fotos: Marta Becerra