El Coll de la Botella

El Coll de la Botella, gastronomía km 0 a 2.000 m
El Coll de la Botella
El Coll de la Botella
14 Enero, 2020
Diana Martin i Gamisans
Si hay un punto que no nos tenemos que perder en nuestra visita a Andorra, sea en bicicleta, en coche, andando o con esquís, este es el Coll de la Botella.

Vistas espectaculares sobre las montañas del país de los Pirineos accesibles para todos y, además, con un restaurante multipropuesta abierto 10 meses al año.

CG-4, AD400
La Massana (Andorra)
España

+376 878 078

Bistrot Restaurant: gastronomía de altura

El acceso al Bistrot Restaurant de la estación de esquí andorrana de Pal-Arinsal se hace por una amplia terraza con vistas hacia las montañas que separan el Pallars Sobirà y el Alt Urgell de Andorra. El restaurante, con el chef Carles Ruiz al frente (antes en el “7 portes” de Barcelona) es un oasis gastronómico en medio de la naturaleza:

Entrecot de “Black Angus”, chuletón de kilo doscientos, pulpo con parmentier de patata, ensalada de “xató” o de tomate confitado y burrata, o tabla de embutidos artesanos de Cal Jordi de Ransol y quesos andorranos de Casa Raubert de Escàs acompañados de mermelada El Pastador de Sispony, son algunas de las propuestas que se pueden degustar en su amplio comedor de grandes ventanales con vistas a este precioso rincón de Andorra que lo acoge.

Pero si por alguna cosa se caracteriza Carles es por sus arroces. Arroz negro con gambas, arroz caldoso con bogavante, arroz de marisco con langosta, arroz de montaña, vegetal o del señorito son las especialidades del chef venido de Barcelona a Andorra para hacer del Bistrot del Coll de la Botella un restaurante a prueba de los paladares más exigentes.

Para los amantes del vino, el Bistrot ofrece una carta donde no faltan los andorranos de Casa Auvinyà, pasando por la D.O. Parellada,  Rías Baixas, Bourgogne o los clásicos Rioja, Duero o Priorat entre otros. La capacidad del espacio es de 45 comensales.

El Grill: cocina rápida elaborada durante todo el día

El espacio diáfano de El Grill lo hace agradable solo entrar. Mesas altas con taburetes, mesas con sillas, el espacio delante de la chimenea y su interminable banco de madera, dan cabida hasta 175 personas. Desayunos “healthy” de 9h a 11h, para seguir con propuestas variadas es resto del día como son las tostadas XL, hamburguesas, carnes a la brasa o ensaladas, son las opciones de esta parte del edificio del Coll de la Botella.

El amplio espacio posibilita la organización de actividades complementarias a la nieve, como son sus noches de yoga y cena. También es posible la reserva del restaurant entero para eventos privados, con menús personalizados. Las peticiones se pueden hacer en los teléfonos +376 878000 y +376 346702 o en el correo colldelabotella@vallnord.com

El “Xiringuito”: la playa en medio de los Pirineos

Todos asociamos la palabra chiringuito a arena, calor, verano. Pero en el Coll de la Botella esta opción se vive con botas de esquí, raquetas o calzado de nieve en invierno y con zapatillas de montaña o en bicicleta en verano (aunque se puede llegar con coche, por carretera asfaltada). Una amplia terraza con capacidad para 180 personas, con una parte de solarium, es uno de los lugares más concurridos de la estación en los días de sol, sea para tomar una bebida o un bocadillo.

Gastronomía y diversión para todos

Otra propuesta de Vallnord Pal-Arinsal es la combinación de actividades en familia, con los amigos o “single” como el parque de cuerdas, la tirolina (actividades practicables tanto en verano como invierno) o la opción, solo para adultos, del snowtrike (una especie de bicicleta de nieve) que se realizan en la zona de La Caubella (1.900) y la restauración del Coll de la Botella. La estación de La Massana ofrece transfer gratuito en la contratación de las experiencias de montaña.

Foto: Diana Martin i Gamisans

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