Lady Madonna

Lady Madonna llegó el 27 de septiembre y se instaló en el barrio madrileño de Las Salesas de la mano de Alex Pérez Albuquerque y Caleb Soler, amigos desde pequeños y convertidos en socios desde hace doce años con otros negocios hosteleros.

En este tiempo han pasado por la creación de unos cinco restaurantes y algún que otro bar de copas que tuvo también su nombre. La echaban de menos, así que han regresado con ella a su nuevo restaurante de la calle de Orellana para que represente la imagen de aquella Lady Madonna de los Beatles: moderna, joven, un poco rebelde y también atemporal, la que gustó en los 60 y sigue gustando a todos, independientemente de la edad.

El estudio de decoración Madrid in Love ha convertido lo que fue Casa Grana, la casa de comidas donde acudía gente de la zona a comer guisos tradicionales, en un local cálido y acogedor con un comedor para unas 42 personas a las que se pueden sumar otras ocho en la zona de las barras. En su terraza caben otras 25 ó 30 personas más. Una parte de ella se plantea para todo el año y otra será estacional.

Mármol y maderas comparten protagonismo con espejos de mimbre, columnas y colores mostazas para destacar la barra y los baños. La nueva versión del suelo hidráulico antiguo, azulejos diversos, lámparas con aire étnico y sillas con pelo de peluche acompañan a una mesa alargada de 12 comensales que invita a hojear revistas de moda y tendencias.

Aquí, casi presidiendo la mesa, nos la encontramos de frente al entrar en el local, vestida de mujer del Renacimiento y mascando chicle. Algo me dice que apuesta por el cambio en muchos conceptos. Nos invita a sentarnos y a disfrutar sin prisas porque ella está allí siempre. Abre sus puertas para recibirnos a las ocho y media de la mañana invitándonos a probar sus desayunos: tostadas de pan rústico, mollets, pan multicereal….

Para los que les guste la bollería: los croissant de mantequilla, las danesas de chocolate, el bizcocho artesano o la tarta del día. ¿Y por qué no un croissant con Nutela o el yogur artesano con frutas o muesli? Yo desde luego, me quedo con la tortilla de patatas. Lo cierto es que esta divertida mujer está por agradarnos desde las primeras horas del día. Tostas, sándwiches, huevos con jamón…hasta un flan de tetilla con frambuesas salteadas. Después de esto, ¡es más fácil ir al trabajo!

Mucho de artesano y mucho de ecléctico tiene su carta para comer o cenar…. O merendar, porque Lady Madonna no cierra sus puertas hasta las 12 de la noche y el fin de semana un poco más tarde, para que podamos tomarnos al menos la primera copa hasta las dos de la madrugada. Si alguien quiere tomársela a media tarde ella estará encantada de acogerle, porque sabe adaptarse a cada momento del día y a cada público.

Lo más artesano de su carta es la materia prima de proximidad. Acertadamente corta y variada, se podría decir que se basa en una cocina de mercado internacional porque en ella hay platos mediterráneos con un toque personal, italianos otros, algunos orientales, hamburguesas gourmet con ingredientes cuidados (la de cebón con tres quesos D.O. es la que Alex nos recomienda) y hasta un original bocata de calamares (chipirones en pan de tinta con piparras y asadillo).

Su horno de carbón de encina le da un punto peculiar a muchos de sus platos como los berberechos de las Rías Baixas o un pulpo braseado sobre batata, ajada y brotes de espárragos. También a las carnes como el lomo de ternera rosada en taco, que nos lo filetean o el Solomillo thai de pollo de corral con agridulce rebelde de jengibre y chili.

Atún rojo al natural con mango, sésamo y ensalada de algas, unas croquetas de carrillera ibérica y su jugo, alitas marinadas de pollo de campo al carbón, albondiguitas en pepitoria con cous cous o una cecina D.O. con foie, reducción de PX y tostas de cristal, son algunas de las propuestas para empezar o compartir mientras se esperan los platos principales.

Todos los postres son importantes dentro de esta original carta y por supuesto, caseros. El mojito de trufa de la pasión con gelée de ron y hierbabuena o el Macaron artesano de chocolate con helado de vainilla natural y espejo de chocolate son sólo algunos ejemplos.

Los precios de los platos no superan los 15 euros, por lo que el precio medio de carta es de unos 25. Tiene también un menú del día, lleno de detalles y bien presentado para elegir entre tres primeros, dos segundos y dos postres por 11,50 euros.

En realidad, Lady Madonna ha sabido romper con lo tradicional  manteniendo sin embargo un espíritu clásico bien entendido, sorprendente pero sin perder la cabeza y sobre todo tremendamente actual con platos para todos los gustos y precios asequibles. La calle es peatonal, así que lo próximo será la terraza en invierno con brunch y mantita incluida. Está claro que si lo que pretendía era enamorar a todos, lo ha conseguido en un tiempo record. Así que, si queremos conocerla o repetir visita, lo mejor será reservar.